viernes, 6 de julio de 2012

La Pornografía, ¿para qué puede servir?


Para que decir de los mucho detractores que la declaran como una de las expresiones más decadentes de sociedad actual.

Pero yo la veo con un sentido positivo. La pornografía es una válvula de escape de nuestros instintos sexuales. Algunos seremos más clásicos y “conservadores” de la porno tradicional y otros más osados. (Debo aclarar que me refiero a las XXX y no a las XXXX o superiores, que son francamente un delito).

Yo soy un buen consumidor de pornografía. De alguna forma me permitió sondear en mi sexualidad y orientación, ya que con el correr del tiempo me pude dar cuenta que me fijaba más en los hombre que en las mujeres. Aunque al principio no reparé en ello.
La razón era que cuando jóvenes (primer año de la universidad) nos conseguíamos alguna porno y nos juntábamos a verla, algunos de mis compañero hacían comentarios como: Uhh que la tiene grande o media wea que tiene el weon, los demás le tiraban tallas y bromas. Por lo tanto yo pensaba en mi interior (no soy el único que se fija en eso), pero había una diferencia, yo nunca hice esos comentarios.
Ciertamente varias veces, dependiendo si el grupo era de mayor confianza, llegábamos a hacer “pajas colectivas”, y en eso yo participaba, miraba, pero muy piola. Era como cuando nos duchábamos todo juntos, yo no me excitaba por verlos empelota.
Así pasaba muy inadvertido. Más aún pololeando (con novia) durante casi toda la carrera.
Tuve la suerte de “andar” (flirtear), y “agarrar”(estar abrazados y besándose en algún rincón o sobre algún sofá en alguna fiesta) con las minas más ricas (bonitas) de la universidad; (bueno también en el colegio). En todo caso siempre llegué a segunda base y nunca más allá. Aunque copeteado (borracho) estuve a punto de pasar a tercera base.
Podría decirse que fui un heterosexual hasta casi terminar mi carrera.
Pero la Pornografía me ayudó, en parte, a descubrirme.
Ahora tengo una muy buena colección, aunque todas gay.

Más adelante les contaré de un carrete (fiesta) que fue inolvidable a finales de cuarto de la U, en que siendo verano nos juntamos 9 amigos a celebrar nuestra finalización de año y terminamos durmiendo algunos desnudos y otros casi en 2 camas de plaza y media. Para mi fue muy freak.


Gracias por el tiempo para estas bobadas.

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