El Orgullo de Ser Minoría

Hace mucho tiempo quería comenzar a escribir, sobre temas de contingencia, sobre vivencias y recuerdos, fantasías, sueños y proyectos, sobre mi vida, etc. Un montón de cosas que pasan por la cabeza, pero por dónde comenzar, dónde?

Contarles que me di cuenta que la forma que tengo de ver las cosas era distinta, así como distinta, era mi sensibilidad. Esa visión no era el de la mayoría; lo que a una mayoría le interesa, a mi me parece aprovechar mal el tiempo, como actualmente programas de farándula, realities, novelas o fútbol.

Tengo claro el porque y es como muy bien lo expresa Tobalo (en su Blog: Ser Chileno: las Confesiones de Tobalo, que ha sido toda una inspiración y ejemplo) soy una minoría dentro de una minoría.

Terminé una relación muy, muy larga, es la única relación seria y no seria, ya que recién en la universidad me di cuenta que estaba dentro de un closet y ahí abrí la puerta. No he salido aún de él para el público, pero si logré salir para mi mismo y aunque fue doloroso, triste y dramático, sentí un alivio que nunca había sentido. Fue la liberación de reconocerse como gay.

Tome la decisión de compartir con Uds. algunas vivencias con la esperanza de que los que están pasando o van a pasar por este descubrimiento interno de ser un ser humano homosexual, tiene tantas posibilidades de llegar a ser exitosa, como la de cualquier persona que quiere lograr el autoconocimiento en diferentes esferas (física, mental, espiritual, sexual, emocional, intelectual, etc.), sólo que nosotros nos vemos obligados a ese autoconocimiento de nuestra sexualidad por la rigidez, estandarización y canones socialmente establecidos como norma.

Pero esa es sólo una parte del ser humano.

La gran mayoría no logra el conocimiento de si mismos y por ende, difícilmente podrán avanzar con armonía durante su vida. Flexibilidad, apertura de mente, tolerancia (real), son cualidades de personas que intentan superarse como seres humanos.

Lástima que sean esas mayorías las que determinen los cánones de normalidad, legalidad y moralidad.

Me he mantenido en el closet, por decisión propia, creo que el paso más importante ya lo dí y espero a futuro dar otros. Ahora ya no me importa escuchar “soltero maduro, maricón seguro”, ya no me pongo nervioso cuando hablan del tema o me preguntan, a lo más les digo: cada quien debe cuidar su culo, no me preocupo de los ajenos; pero no estoy dispuesto a hacer sufrir a mi familia; en particular a mis padres , ya que ellos están viejos, enfermos y fueron criados en una época que se consideraba la homosexualidad como una aberración, enfermedad y castigo de Dios (aún los hay). Quien soy yo para hacerles pasar por semejante sufrimiento. Sé que me apoyarían y me seguirán amando, pero que se gana? Yo no me voy a sentir mejor por hacerles saber algo que yo ya sé. Además siempre recibieron a mi pareja como a mi mejor amigo y nunca se han imaginado nada más. Imagino que a su edad ya no pueden ver cosas evidentes para otros.

Bueno, más adelante les contaré más.

Gracias por su tiempo.

mailto: elorgullodeserminoria@gmail.com